Hablar en Público ¿Para qué?
Hablar en público permite tomar el liderazgo en las reuniones de trabajo, para exponer con claridad y precisión nuestras ideas. Nos hace profesionales eficientes y con una voz propositiva. Los ascensos laborales o la búsqueda de empleo se realizan con facilidad, ya que la palabra es una llave universal que abre todas las puertas.
Hablar en público permite
aumentar el aprovechamiento de los estudiantes. Quien habla para enseñar,
aprende dos veces. Muchos estudiantes al tener en puerta su examen profesional,
desean dominar el arte de la persuasión. La comunicación oral, es una de las
competencias más exigentes en el nuevo modelo educativo.
Para los emprendedores y
empresarios, el hablar en público es una necesidad indispensable. Quienes
dominan la oratoria empresarial, logran motivar a su personal, dirigen juntas
ejecutivas logrando que las ideas fluyan, realizan presentaciones que
incrementan considerablemente las ventas y generan relaciones de negocios
importantes para su marca o empresa.
Muchos políticos anhelan saber
hablar con argumentos sólidos y llenar de belleza y emoción sus discursos. La
gran mayoría de intervenciones de candidatos y servidores públicos son frías,
largas y aburridas, usando un vocabulario lejano al ciudadano.
Hablar en público es una
necesidad de muchos intelectuales, que guardan ideas brillantes y un talento
enorme, que se queda prisionero en los límites de su pensamiento y no pueden
compartirlo con los demás. Algunos llegan a vivir con enojo y frialdad, por no
poder destacar como merecerían, ante la imposibilidad de dominar los escenarios
académicos.
Hablar con persuasión en el mundo
de los abogados, es un talento que les abre mayores expectativas profesionales.
Los juicios orales han creado en el mundo de los profesionales del derecho, una
nueva elite, donde no basta el conocimiento jurídico, es necesario el poder de
la palabra. Ahí no tiene espacio los abogados que titubean al hablar.
Hablar en público es una
necesidad para todos quienes han sido víctimas de un abuso y desean denunciarlo
y no se atreven. Más allá del valor civil que se requiere, la falta de
seguridad para hablar, hace que guardemos en nuestro ser, muchas cosas que nos
hacen sentir mal. La palabra nos hace libres.
Comentarios
Publicar un comentario